24 de agosto de 2011

En cierta ocación

Advertencia de contenido de la entrada anterior: quizá en esa entrada me escuhé muy poco humilde y además despota y no es que sea un ojete de primera, sino que así lo ameritaba el poema en cuestión.



En cierta ocasión estaba mi hermano viendo un documental, poco rato antes del suceso que explico a continuación ya lo había molestado un poco clavándole mis codos sobre su hombro, pero esto no culminó en nada importante solo en una simple exclamación de mi hermano que me decía que me quitara de ahí. Lo hice y me fui unos segundos a ver que había de comer, en lo que jugueteaba con cosas como “si la vida te da la espalda”, decía muestras mi hermano ponía pause a su documental porque yo no lo dejaba escuchar bien, al ver que él no terminaba lo que era obvio yo lo hice y dije: “agárrale las nalguitas“. Al no satisfacer mi saciedad puesto que nada de la cocina se me antojaba siguiendo con un humor dicharachero y retirándome a mi habitación canté fuertemente una canción que seguidamente cantaba:
—“En tus manos aprendí”— Canté, y en seguida callé un momento. En ese instante como ya había hecho antes mi hermano puso pause a su documental.
Esperando que reanudara su reproducción para volverlo a fastidiar con la continuación de mí canto. Intercambiamos miradas acompañadas de risas pequeñas como de complicidad. Eso pasó durante aproximadamente 30 segundos. Ambos sabíamos lo que pasaría si continuara con su reproducción, ya que sabíamos textualmente la continuación de la canción.
Pero mi hermano, decidido a que no le fastidiaría de nuevo, no enojado sino más siguiéndome el juego y para ganar el altercado; aprovechó aquel silencio para cambiar de actividad en la computadora, puso música y dijo:
—Ya, continúa.
—No, ya no —le dije, y me marché a mi cuarto—
Pero en un momento seguido de que me metí al cuarto escuche que él reanudó la reproducción de su documental, entonces salí rápidamente, y como si ya los dos esperábamos desesperadamente la terminación de la frase en el canto, tal como cuando un niño abre una paleta y esperaba todavía chuparla, nos miramos un pequeño instante con la misma mirada de risas de complicidad. Entonces se sintió un descanso que acompañamos por risas des ahogadoras cuando dije lo siguiente:
—“a beber agua”



23 de agosto de 2011

Este no es un Poema de Amor



Nos conocimos una mañana,
Me viste entrar sin gran importancia,
Te vi, vestías un suéter de lana
Y Movías tus manos con gran gracia

Al poco rato me viste, y en ese rato soñaste
En un futuro distante, conmigo adelante.
No niego, al principio se alegró mi corazón
De verdad, me encantó tu sensación.

Un día, tu amistad mi vida tocó
Y de tanto hablar tú de ti,
Ciertamente mi pobre corazón se asfixió,
Y esa vez en sueños de una dama no entró.

Me confundiste con aquel
Donde tú habías puesto un sueño,
Yo te decía: yo no soy él
En serio que no soy tu dueño.

No quiero ser aquel
Por quién tiembla tu piel.
Te lo dije, no quiero ser él
Porque sería como hiel.

En repetidas veces amablemente lo dije.
Un amable que confundías con cariño,
Pero toda mujer merece un hombre cortés,
Como todo hombre merece una mujer prudente.

Un desdichado de corazón frio,
Un hombre que no le tiembla la piel,
Un estúpido que no merece el afligió
De una mujer que soñaba con él.

Puedes decir esto y mucho más,
Que al cabo en efecto fue verdad.
Pues un hombre calculador y duro,
Jugó por diversión tu lealtad

Jugó contigo con egocentricidad
Asfixiado por tu amistad, es verdad.
Pero quizá eso no le dio el derecho
De tu vida de un tajo maltratar

Un hombre calculador y duro
Que sabía y afirmaba no ser tu dueño,
Y para tu mala suerte creó un plan muy bello
Que estalló para esfumar tu sueño.


Literalmente lo nuestro no acabó bien,
Quiero decir de veras que lo siento
Pero mentiría con eso lo sé, mejor digo:
En efecto era un fiasco lo nuestro.

11 de agosto de 2011

En 30 segundos

En este momento puedes estar siendo la inspiración de otra persona que además es cualquier desconocido, por cómo te mueves por lo que le recuerdas, por como deslizas tu dedos sobre tu pelo,… tiempo y espacio, puedes estar muy a tiempo, pero si no estás en el espacio correcto no sirve de nada, puedes estar en el espacio indicado, pero si no estás en el tiempo preciso, tampoco servirá de nada.

Tantas personas tantos defectos, tantas virtudes,... puedes pasar momentos increíbles en un instante, pueden pasar cosas inimaginables, en un momento, también en un momento puedes escribir tu futuro, puedes predecir el rumbo, como en el ajedrez, muchas veces visualizas una posición ganadora, y esto no quiere decir que veas con precisión los movimientos por venir, no, solo sabes el ambiente donde se desglosan, puedes visualizar tu futuro solo pon atención en tu presente, y verás lo fácil que es.

Como dice Facundo Cabral, no hagas nada por obligación, si no por amor, porque lo que debe de ser será y llegará naturalmente. Y adivina que, todo esto, pasó en un momento.

Empuja


Que mal te sientes cuando sabes que te hundes en un pozo de ignorancia, que no tienes contacto con aprendizaje, y percibes carencia inmediata de conocimiento; lo peor de todo es que sin darte cuenta, y eso si que es una patada en el autoestima.

Quizá la cura a eso sea de vez en cuando leer una frase célebre. Puede ser, quizá la solución sea estudiar una tarde completa matemáticas, quizá sea la solución rebatarle la vida a un desdichado, o quizá sea la solución recordar sus ojos una tarde. Quizá...

Pero de lo que si estoy seguro es que debes hacer lo necesario, lo que sea posible, para salir, para brincar de ese pozo de desdicha a un lugar sano con dicha.

Solo aprende y haz.